Hoy que hay tantos viejos rechazados. Abandonados. Cuidados por asalariados no familiares. Hoy que se pide al Estado que cuide de ellos. Hoy que son carga. Hoy que el valor de la juventud es absoluto y que las maduras y maduros que pueden, intentan prolongarla mediante cirugía. A pesar de que los jóvenes alguna vez serán viejos. A pesar de que no por ser joven ya se es persona valiosa o valerosa...
Pongamos esta foto en un periódico. Imaginemos cuál sería la reacción del lector de hoy. Quizá alguno ni se pararía a ver el pie de foto. Quizá a otro se le pasaría por la cabeza algún comentario del tipo: "¡una vieja desconocida! ¡menuda noticia tan interesante!" Otro pensaría: "tiene pinta de que chochea".
Me encontré hace unos meses un reportaje muy interesante en un medio de comunicación. Era sobre la vida de una mujer a la que no conocía ni le ponía cara (pues era por la radio). Era sobre la vida de una persona, por el valor de su vida, no por el valor actual que dicta el morbo, la truculencia, el frikismo, o la compra-venta de la intimidad. Y no fue en ningún medio de los más conocidos. Fue en Radio María. (A decir verdad, después me enteré que "El País" dio noticia en su momento y quizá otros). O sea, que mira por donde, para conocer algunas facetas de la vida humana hay que ir a medios como este, tan etiquetados de alienantes.
En este terrible mundo ¡el bien existe!, hay mujeres heróicas como esta viejita, mujeres inmensas que nos situan en nuestra pequeñez.
Las mujeres jóvenes y guapas son un regalo. Pero Irena es la más guapa y la más joven.
Dejo un enlace para quien esté interesado en conocer algo de lo que hizo:
http://www.conelpapa.com/irena.htm
Como anécdota, en estas historias siempre tiene que haber algún detalle chusco que nos demuestre que no siempre la fama y el reconocimiento humanos aciertan: la propusieron para el Nobel de la Paz, pero ese año ganó Al Gore.
En uno de los resúmenes de su vida que consulté decía: Irena Sendler no se considera una heroína. Nunca se adjudicó crédito alguno por sus acciones. "Podría haber hecho más," dijo. "Este lamento me seguirá hasta el día que muera."
Y para que sirva de polémica: su vida me parece que es una de las mejores contrapartidas que se le pueden presentar a los intentos de los gobernantes actuales para situar como un valor la ampliación del aborto.
En lo más básico estamos de acuerdo y eso es lo que importa.
ResponderEliminarUn saludo ;)
El valor de la experiencia y de las vivencias de estas personas es impagable. Lo malo es que hoy no los valoramos.
ResponderEliminarPor cierto, sobre Irena Sendler tienes bastantres datos en el blog "holocuastoenespanol.blogspot.com". Tiene una entrada magníficamente documentada sobre esta anciana heroica.
Bien por tu blog.
Ahora entraré en el enlace, pero lo que he sentido al verla ha sido ternura, buena gente, cierta nostalgia. No sé me ha impactado. BESITOS Y SALUDITOS
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