sábado, 23 de octubre de 2010

El dinero, como siempre, por el medio

En octubre pasado en Sevilla se reunieron dos grupos de personas. Uno para defender y promover el aborto y otro para mostrar su oposición al mismo. Sin pretender hacer un análisis exhaustivo de un tema tan importante, solo voy a comentar un aspecto, como se podría hacer en una película de detectives: ¿Qué ganan unos y otros en la defensa de sus posturas? ¿Cuál es móvil?
El ser humano puede tener, incluso esconder cualquier tipo de intereses y es posible que a mi se me escapen los del grupo de los que creen que el aborto no es solución. Su postura requiere un alto compromiso en futurible: un apoyo económico y de todo tipo a la mujer y a la familia como institución, un apoyo a los niños que vengan con o sin problemas, una priorización del dinero para proveer por esas necesidades y no ocuparlo en otras.
En la actualidad, las personas (porque todo al final se hace por personas concretas) que tienen negocios de abortos ganan mucho dinero. Dicen defender a la mujer, el progresismo social y la libertad, todos conceptos genéricos. Habría que pulsar la opinión de la mayoría de las mujeres que han sido "ayudadas" por ellos para conocer verdaderamente los resultados de su obra. Mientras, recojo unos datos sobre la ganancia económica:

-En 2008 el número de abortos legales consumados en España fue de 115.812 casos. Solamente el 0,001% de los casos fue por violación.
-El coste medio de un aborto es de 450€ (sin contar las múltiples complicaciones posteriores).
-Según estos datos el gasto en abortos de solamente las españolas es de más de 52 millones de euros, más de 8500 millones de las antiguas pesetas.

En España su Gobierno no solo ha legalizado la práctica del aborto, sino que ha tomado postura a favor de los que tienen hoy negocios con el aborto. Utilizando además, de un viejo truco de la propaganda totalitaria: cambiar la realidad cambiando el lenguaje. La ley a la que se acogen quienes hacen dinero con el aborto en España se denomina "Ley para la salud sexual y reproductiva".
Todo esto en un país en el que se está dicendo que no hay suficiente natalidad para sostener el sistema de pensiones y de servicios públicos. ¿Por qué estas contradicciones?

Muchos Amancios en La Coruña

Hoxe na radio escoitei unha breve reseña do xa famoso Amancio Ortega, o empresario creador de Zara. Dicía que a primeira tenda abríuna na rua de Juan Flórez na Coruña, no ano 1975. E, lonxe no tempo e na posibilidade de voltar, o meu maxín foise a parar naquela cidade e naqueles anos da miña adolescencia leda. Daquela eu so sabía de outro Amancio. Por entón non precisaba o apelido para ser identificado. Pero eu non lle tiña moita lei porque pensaba que desertara do Deportivo para ir ó Madrid. E tamén porque ainda non me tiña convertido ao verdadeiro fútbol e defendía o fútbol de forza. Agora xa non é así, como non son tantas cousas.
Agora valoro o fútbol técnico o fútbol artístico, e por tanto, Amancio Amaro Varela é un dos persoaxes importantes da miña memoria. Naqueles intres eses asuntos eran para min moi importantes: o fútbol era o meu único asunto. Soñaba con chegar a ser futbolista. Téñolle que dar as gracias ao meu compañeiro Rolando que me chamou para xogar no Victoria xuvenil. Dous anos de ilusión e felicidade, o meu fútbol non daba para máis. Ficou nos descampados da Sagrada Familia. Gracias Rolando. O Victoria foi o primeiro equipo de Amancio, despois fichou polo Deportivo e logo polo Madrid. Un día saindo co meu irmán do Parque de santa Margarita, cruzamos con un home e de entre os dous rapaces elixiu acariciar o pelo do pequeno, meu irmán. Coma se fose unha imposición de mans Amancio era o home fugaz que seguramente viña de pasear polo parque da sua nenez, e ese rapaz logo foi un "zurdo cerrado" que con dazaseis anos xogaba na liga nacional de xuveniles co Deportivo e non chegou a mais posiblemente porque non quixo. Marchou a estudar a Madrid para facer avións. Recordábame ao xeito de xogo de Fran. Coido que Fran formaría parte do triunvirato de mellores xogadores coruñeses da historia.
É dicir, Luis Suarez Miramontes (para a xente nova, non confundir co uruguayo actual que ainda que é bo, fáltalle moito para igualar), Amancio e Fran. Por non dicir dos dez mellores europeos.
Co permiso de Chacho (o máximo goleador na selección española nun só partido, de quen falaban exquisiteces "¡Ay Chachiño si tú quisieras!), Juan Acuña e Paco Buyo. Non está mal esta canteira. A Amancio gostáballe xogar ao fútbol e logo de retirado ainda o demostraba na praia de Bastiagueiro coma un mais entre os bañistas. Vino eu tirar un penalty antes de que se aprestase alguén de porteiro. Xenio e figura e pillería. Este servidor xogou no mesmo equipo que Amancio de rapaz e o meu fillo é o neto do entrenador que Amancio tivo xa famoso e profesional no Madrid. "El mundo es un pañuelo". Mentras me documentaba para escribir isto encontro que os campos de terra de Meicende nos que eu iba a xogar co Victoria, agora son de herba artificial e levan os nomes precisamente de Luis Suárez e Amancio Amaro.
A Amancio, o de sempre, o futbolista da canción da "raspa", o meu veciño da calle Vizcaya, ese que morrerá co acento coruñés ainda que case toda a sua vida estivo fora, quero dende eiquí darlle as gracias por esa ilusión que levou a tantos de nos, por medio dun simple xogo de nenos, e nos fixo presumir de coruñeses.
Amancio Ortega, o misterioso empresario que escomenzou traballando de dependiente, agora ten tendas por todo o mundo. Coma Felipe II nos seus dominios non se pon o sol. Sempre haberá quen lle poña pegas a todo, incluso intoxicaron algúns con mezclalo no uso do emprego ilegal. Mais o certo é que a sua máxima fortuna son os 24.000 empregados que ganan a vida nas suas empresas. Esta obra inmensa, digan o que digan, de favorecer aos seus semellantes é o que val, fronte as palabrerías de moitos. Incluido eu. Deus llo pagará. A Amancio Ortega darlle-las gracias por todo o ben que espalla, dando traballo a tantos. É orgullo dos coruñeses.

martes, 12 de octubre de 2010

"La muerte no es el final" es una canción religiosa que canta la Resurrección y su autor es Cesáreo Gabaraín

Hoy se ha celebrado el desfile del Día de la Hispanidad. Y también el acto de recuerdo a los caídos por España. Como momento más intenso siempre destaca el canto de los soldados "La muerte no es el final". Me temo que para el gran público es un himno militar bastante emocionante (incluso para aquellos que cantaban aquello de que " a mi la música militar nunca me supo levantar" -¿alguien sabe a lo que me refiero o ya es estribillo muy viejo?-). Resulta que quizá los ideólogos pro-gubernamentales actuales, (que tienen claro atacar todo lo que tenga que ver con cristianismo, pero que también les falta la formación y cultura suficientes como para no columpiarse diciendo que el Papa había regalado una joya o algo así de perlas, creo recordar, a la esposa de Zapatero, ¡cuando era un rosario!) tampoco saben que es la adaptación de un canto religioso cristiano, que recuerda la promesa de Jesús de la resurrección con Él. La letra que cantan en el arreglo militar también menciona a la fe en la resurrección, como dice el mismo título. Si se enteran, quizá lo prohiban cantar a los militares. Estos que pretenden que la retribución de los militares solo es su sueldo (a eso le llamaban antes ser mercenario). La versión tocada por una banda militar bien afinada, su cadencia honda y solemne, y la letra cantada por soldados (y soldadas, que diría Aído) a todo pulmón y en grupo grande, cantada muchas veces por compañeros de los mismos difuntos, ponen los pelos de punta a cualquiera... creo que también porque reafirman la esperanza escatológica definitiva (al diccionario, los de la joya de perlas). Para que vean los bienintencionados que dicen que hay que erradicar todo lo cristiano de la vida pública y no se dan cuenta que hacerlo no supone sacarse una muela, sino extirpar el corazón, o mejor el cortex de nuestra cultura.


Pues bien, resulta que su autor es un cura llamado Cesáreo Gabaraín, ya fallecido. Es también autor de decenas de canciones que se cantan muy frecuentemente en las iglesias de habla española. Me apetece darlo a conocer para quien lea ésto y no lo conociera. Incluso para los no "practicantes" les resultará familiar más de una, por ejemplo, "Pescador de hombres". Canciones que se han podido cantar desafinadamente por cuatro ancianos en una iglesia perdida, pero que pueden sonarle a Dios mejor que una gran sinfonía tocada por la Filarmónica de Berlín, porque es una oración. Ya que Dios no sabe de masas sino de personas concretas, cada una la más importante por inservible que sea para el mundo. "La muerte no es el final" es un himno que se canta en los funerales, en las iglesias, es oración por los difuntos y es consuelo para sus deudos. Oración y consuelo para mucha gente sencilla, no está mal. No sé si la SGAE se habrá preocupado de recaudar sus derechos de autor (pisando sus inspectores las perdidas iglesias de las aldeas más remotas). Eso es parte de lo que pudo entregar a Dios Cesáreo Gabaraín cuando murió con 55 años, no creo que en ese momento le haya importado si la SGAE le había pagado o no. Dejo enlaces referidos a a él y sus canciones:

http://es.wikipedia.org/wiki/Ces%C3%A1reo_Gabar%C3%A1in
http://www.enciclopediacecilia.org/wiki/Ces%C3%A1reo_Gabar%C3%A1in

La letra de la susodicha canción:
Tú nos dijiste que la muerte
no es el final del camino,
que aunque morimos no somos,
carne de un ciego destino.

Tú nos hiciste, tuyos somos,
nuestro destino es vivir,
siendo felices contigo,
sin padecer ni morir.

Cuando la pena nos alcanza
por el hermano perdido,
cuando el adiós dolorido
busca en la fe su esperanza.

En tu palabra confiamos
con la certeza que Tú
ya lo has devuelto a la vida,
ya lo has llevado a la luz.
Ya lo has devuelto a la vida,
ya lo has llevado a la luz

Cuando, Señor, resucitaste,
todos vencimos contigo
nos regalaste la vida,
como en Betania al amigo.

Si caminamos a tu lado,
no va a faltarnos tu amor,
porque muriendo vivimos
vida más clara y mejor.


A mi me gusta. Anima a la esperanza. Y en el trozo que los militares cantan "en tu palabra confiamos", no se refieren a Zapatero, ni a ningún otro hombre salvo a Jesús de Nazaret.

domingo, 3 de octubre de 2010

El sindicalista con traje de burgués cuando no le ven. La corbata te delata

Es tan verdad, aquello de que no juzguéis y no seréis juzgados. Pero también es cierto que hay que tomar decisiones diarias sobre las cosas. Recientemente tuve que tomar una, y doy gracias de que pude hacerlo libremente, no como tantos presionados por unos u otros. Aunque se trataba de una situación que se podría calificar de trampa saducea, o de instrumentalización de los trabajadores para uso y disfrute de las consabidas castas sindicales y políticas, yo tenía unas cuantas razones para decantarme por una de las dos opciones.
Sin embargo hubo un detalle que me llamó la atención. Uno de los abanderados de una de las opciones aparecía en una foto con una corbata durante sus vacaciones, mientras que cuando salía en la tele, iba a La Moncloa a ver al Presidente del Gobierno y que le fotografiaran o daba una rueda de prensa, salía siempre con una camisa monda y lironda, sin corbata. Y me vino a la cabeza el estribillo de la canción: "TEATRO... ESTO ES PURO TEATRO..."
Este fin de semana el sermón que le he encasquetado a mi hijo adolescente versó sobre la responsabilidad personal en el devenir del propio destino. (No con estas palabras y entremezclándolo con metafísicas futboleras para que no le dé un "pasmo" de lo que tiene que oír a su padre). Encontrar un trabajo, en términos generales (porque la suerte también es necesaria) dependerá fundamentalmente del nivel de competencia que pueda ofrecer el trabajador a través de su formación y esfuerzo, y no de echarle la culpa al maestro armero si no se consigue.
Al menos en sociedades abiertas o en las que sobreviva una "clase media". Porque esta noche hemos visto la película "El niño con el pijama de rayas" y la historia nos dice que también existen las liquidaciones masivas, las injusticias y arbitrariedades y las dictaduras.
No pongo la foto del personaje que me llamó la atención por si alguien aún no se imagina a quién me refiero y prefiere quedarse con la duda.
Free counter and web stats